dos caras paras dos monedas.
no trato de defenderme, pero a veces es necesario rebuscar
en los bolsillos de lo viejos pantalones
pa encontrar los agujeros por donde perdiste los billetes que ahora te faltan,
aun así estate tranquilo, no pasa nada,
ya sabemos que el mundo siempre está esperando algo de ti
mientras tú, lo que quieres, es dejar de escuchar a gente decir
que las oportunidades se pasan
porque has visto terminarse demasiadas botellas y ya sabes
que siempre va a haber una más
esperando en la proxima gasolinera que pares.
por eso puedes salir a la calle sin rendir explicaciones,
por eso yo no tengo que explicarte mis errores ni me importa que no los comprendas,
las manchas de mi camisa o las arrugas de mis alas
son cosa mía,
mis propias motivaciones a veces están llenas de alevosía
y sin embargo sigo olvidando mis trece cada vez que vuelve a ser martes.
tengo un montón de cosquillas donde buscarme y puedo tener la suerte
de que de vez en cuando, alguien, va a mi agarra con todas sus fuerzas
y me mete aire sin presión en la boca de la única forma posible: asfixiandome.
no me mires de esa forma, igual que el resto
yo escalo entre metros y obras para poder venir hasta aquí esta noche.
caprichosa y dulce, busco esa sonrisa por todas partes
y solo encuentro caricaturas de gestos descompuestos que se olvidan de mi nombre por la mañana.
no era nada, pero parecía todo, eh?
así que si un día me ves perdiendo por goleada
podrás decir que al menos nunca hice trampas,
soy un alfil incapaz de andar recto
y por la espalda se me da fatal atacar.
ellos me han visto arrastrarme como un reptil,
colgarme al cuello de cualquier girafa,
perderme entre las leyes de esta selva jodida y hostil
que es el centro del mundo por la noche.
y todavía hay quien pide tranquilidad llegado este punto.
por qué la gente busca comodidad?
no me preguntes, llevo las últimas tres brujulas desorientado
y las estrellas, a mí, nunca me dicen nada.
"qué te voy a decir..."
a fuerza de sacarme preguntas he logrado sobrevivir
y ahora sigo por aquí,
-no he cambiado tanto desde me acuerdo de ti-
y me tienes en cuenta la victorias solo y te olvidas de mis fracasos,
precipicios a prueba de saltos,
guillotinas para cuellos sin caricias,
mando chupetones por correo
y en la llamada del miércoles, sí, me arrepiento, no supe dar un abrazo.
qué quieres de mí, si a duras penas avanzo.
llego tarde ya para encontrar algo abierto a estas horas
y este disfraz no ayuda
y la paz interior de la que todos hablan, en mi caso, se resume en una palabra: tempestad.
eche de menos tu mano a la hora de saltar
y aun así di el salto,
aquel charco parecía un mar...
..."pero tú ya lo sabías"
y ahora entiendo
y ahora vamos:
me puedo explicar...
lo único en donde la experiencia no sirve de nada
es en la mirada de los 5 años,
por eso hablamos de niños en tercera persona
como si nunca lo hubiéramos sido,
como si fueran algo muy extraño.
escucha y si quieres me entiendes y si no tampoco es que pase nada:
no es que me crea el personaje que finjo,
es que finjo el personaje que me creo
cuando crear y creer
son verbos distintos.
lunes, 10 de diciembre de 2007
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