Nadie te pudo ver bailar
la danza de la lluvia
delante de los dioses de la sed.
Cuando quisimos soñar un futuro
los hombres
ya lo habían destruido.
el olor a ceniza
no sabíamos si era de guerra
o de día después
de una fiesta.
todo quedó
como envasado al vacío,
el olvido en una caja de marionetas.
excepto tu risa,
que seguía bailando la danza de lluvia
en el desierto
de los dioses de la sed.
miércoles, 23 de marzo de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
siempre
nos pasa lo mismo
soñamos
t
a
r
d
e
.*
ya es hora de amortizar los bienes a los dioses
un saludo my friend
(mira el mail, tienes una putada en la bandeja de entrada ;))
todo quedo como envasado al vacio..
olvidado..
magnífico poeta usted. Saludos desde México
Publicar un comentario